Esta raza de perros tiene su origen al noreste de Canadá, pero no en Labrador, sino en las islas de Terranova (Newfoundland). El Labrador Retriever desciende de los perros llevados por los exploradores y primeros pobladores europeos a esa región. Fueron dos las razas que se desarrollaron en un estado natural (o por selección natural). Una de esas razas fue el Labrador Retriever que presentamos aquí, la otra fue el Terranova. Existe referencia del Labrador ya en 1822 donde se le llamaba el Perro de Agua Pequeño, en comparación con el Terranova. Tal referencia no sólo destaca la habilidad que demostraba como cobrador de aves, sino que también menciona el perro ser activo aun durante la temporada cuando la superficie del agua estaba congelada. Razón por la cual se prefería que tuviese el pelo corto.
El Labrador Retriever era usado de dos formas por los pescadores. Unos trabajaban desde tierra. Se lanzaban al agua a traer las cuerdas, atadas a una boya, de las redes. Otros iban en los botes, lanzándose al agua de igual manera, para llevar las cuerdas de las redes hasta la costa donde le esperaban otros pescadores. Se empleaban estos métodos ya que era peligroso para los botes acercarse mucho a la costa. Los perros que iban en los botes también estaban a cargo de recoger todo lo que se cayera fuera de borda.
Estos pescadores vendían la pesca en Inglaterra. Eventualmente alguien se fijó en los perros y comenzaron las ofertas. Llegando a ser una línea complementaria para los pescadores el vender sus perros a los aficionados a la caza. Se documenta de su pariente, el perro Terranova, ya haberse encontrado en el Reino Unido por el año 1786, lo cual es causa que se estime que el Labrador Retriever en esa fecha también ya había hecho su travesía al Viejo Mundo. La acogida fue grande por las cualidades de gran cobrador y perro de caza en general que ya tenía el Labrador. Una de esas cualidades es que este perro tiene lo que le llaman boca suave (“soft mouth”), no daña la presa con los dientes al morderla.
Entonces en Terranova, Canadá, se implantaron impuestos (Newfoundland Sheep Protection Act, 1885) sobre los perros y el Labrador Retriever comenzó a desaparecer en su tierra natal. Mientras aquello sucedía, en Inglaterra se impuso una ley (Quarantine Act) que demandaba que todo animal que se importara tenía que permanecer en la propiedad de un veterinario bajo sus observaciones en cuarentena por seis meses. A estas circunstancias se añadió el hecho que la industria pesquera de Terranova había disminuido su tamaño en gran proporción. El resultado siendo que los criadores no lograban importar sangre nueva mientras que en Canadá desaparecía la raza. De 1900 a 1933 se documentan cinco perros originales del Canadá haber sido llevados a Inglaterra, uno de ellos fue vía Noruega.
A consecuencias de estos impedimentos, comenzaron los cruces. No se hizo con la intención de mejorar la raza, sino porque no había suficientes Labradores y sus cualidades eran muy deseadas. Se le cruzó con el Retriever de Pelo Liso, el Retriever de Pelo Rizado y otras razas de caza. Fue poco lo que cambió el Labrador en apariencias externas, pero sus instintos de cazador se desarrollaron aun más. Cuando aquello ya se iba de la mano, el Quinto Duque de Buccleuch (1806-1884) comenzó un registro de sus Labradores y ese fue el comienzo de la raza del Labrador Retriever que conocemos hoy en día. Otro aficionado a la raza, que fue de sus perreras de donde salieron muchos de los antepasados de los perros del presente, fue el Tercer Earl de Malmesbury (1807-1889).
Al principio, además del Perro de Agua Pequeño al Labrador Retriever se le llamó el Perro de Aguas de San Juan y Terranova de San Juan (Saint John's Newfoundland). Se acredita al Earl of Malmesbury de haberle dado el nombre de Labrador.
En obediencia no hay otra raza de perro que pueda competir con el Golden Retriever, tanto en el círculo de exposición como en la vida real. Sus hazañas como perro de rescate en las últimas décadas sobrepasan todo lo que se puede demandar, o imaginar, de un canino ser capaz.
Originalmente usado como perro cobrador de cacería, este retriever ha sido reclutado para otras labores que requieren continuo uso de su noble disposición. Se le considera una de las mejores razas de compañía para las personas deshabilitadas y lazarillo para las personas ciegas.
Esta raza fue creada en el Reino Unido. El Lord Tweedmouth comenzó a criar un Retriver dorado en 1865 al que le llamó Nous. Este perro lo cruzó con una perra Spaniel de Agua Tweed, llamada Belle. Continuaron los cruces poniendo énfasis en las habilidades sobre la apariencia. Se le añadió algo de Bloodhound y del Setter Irlandés. En la década de 1890 ya la raza estaba relativamente establecida.
El Retriever de Pelo Liso
El Retriever de Pelo Liso es un perro de cacería de buen tamaño. Este perro causó gran interés entre los aficionados a los perros de cacería a finales del siglo XIX.
Este perro se originó en Inglaterra, posiblemente de cruces del antecesor del Labrador Retriever con setter y pointer.
El Retriever de Pelo Rizado
El Retriever de Pelo Rizado es una de las razas de perros de cacería que se desarrolló con el propósito de cobrar las presas tanto en tierra como en agua. Esta raza es más antigua que el Retriever de Pelo Liso, la cual, por razones de tener la boca menos dura (dañar menos a la presa) y mejor olfato, le reemplazó en popularidad. Sin embargo, el Retriever de Pelo Rizado tiene tanto mérito y es tan inteligente y trabajador como lo es su pariente.
Esta raza tiene su origen en Inglaterra. Ya se encontraba establecida en el siglo XVI.
El Cobrador de Patos de Nueva Escocia es un perro mediano de pelo rojizo. Su apariencia se asemeja en algo al Golden Retriever, aunque más pequeño. Este perro que presentamos aquí tiene membrana entre los dedos.
Es un perro de cacería, destacándose en atraer a las aves y en cobrarlas después en el agua. Las atrae cobrando una pelota, u otro artículo semejante, del agua. Las aves en su curiosidad se acercan volando a ver que es lo que está sucediendo. Entonces el cazador emplea su escopeta y el mismo perro se encarga de cobrar la presa.
Esta raza es natural de las provincias al este en el Canadá. Se originó a principios del siglo XIX.
El Retriever de la Bahía de Chesapeake es un perro de buen tamaño de pelo no muy largo. Este perro hasta no hace mucho no se exhibía. Sus criadores preferían mantenerlo como un perro de cacería y no correr el riesgo que la popularidad de sus aptitudes como perro de utilidad dañaran su habilidad de cazador. En los últimos años se ha comenzado a ver en los círculos de competencia donde se le acreditan grandes logros.
De acuerdo a los expertos, no hay otra raza que pueda superar a este perro como cobrador de patos. Su resistencia no conoce el cansancio o la fatiga. Se dice que un ejemplar en condiciones físicas normales puede nadar millas (kilómetros x 1.609) en aguas con considerable oleaje y parcialmente congeladas. Razón por la cual es empleado como perro de rescate con excelentes resultados.
Esta raza tiene su origen en el área alrededor de la Bahía de Chesapeake, al este y centro en los Estados Unidos. Proviene de dos terranovas que fueron regalados a las familias que ayudaron a las víctimas de un naufragio ocurrido en esas costas en 1807. Estos dos terranovas se ligaron con los cobradores (retriever) de patos que eran los perros que se criaban en la zona, eventualmente estableciéndose esta nueva raza que tiene el instinto de los retriever y la habilidad del Terranova en el agua.